El 2020 ha sido un año diferente a lo que todos conocíamos. Esos cambios también han influido en la gestión del alquiler de autocares.
Como ocurre con toda crisis, los momentos difíciles no ayudan a reflexionar en la mejor forma de adaptarnos a la situación. Ponemos en marcha nuestra creatividad para acercar a nuestros clientes un servicio de calidad y, sobre todo, muy seguro.
Mediante este artículo queremos hacer una recogida de los cambios que han llegado para quedarse.
Lecciones del 2020 que afectan al alquiler de autocares
Para empezar, nuestras políticas de limpieza y desinfección se han adaptado a las necesidades actuales. Aunque siempre ha sido un aspecto básico para nosotros, hemos incorporado métodos efectivos contra el coronavirus, como ya te informamos en el artículo del blog “¿Es seguro el alquiler de autocares tras el coronavirus?”.
Más tarde, tras muchos meses de clases suspendidas, los niños regresaron a la escuela y se reactivó el transporte escolar. ¿Qué respuesta dimos?
Publicamos recomendaciones útiles tanto para los pequeños como para sus familias a la hora de esperar, hacer fila y embarcar o desembarcar. Esas medidas siguen aplicándose a día de hoy. Puedes consultar en el artículo “Medidas de seguridad adoptadas en el transporte escolar”.
Y, por encima de todo, nuestro esfuerzo se ha volcado en procurar que nuestros clientes tengan la sensación más parecida a “normalidad”. Por ello, hemos continuado operativos, ofreciendo nuestro alquiler de autocares para bodas, ceremonias, asociaciones, clubes deportivos, paticulares… En definitiva, para todo aquel que lo necesitara.
Este año ha demostrado más que nunca la importancia de contar con un transporte seguro, que huya de saturaciones de gente y que abogue por la comodidad de todos los pasajeros.
Cerramos el año a tu lado y esperamos un 2021 donde sigamos superando con éxito todos los retos.